México es lo que decimos que es y lo que no queremos decirnos que es. La literatura nos habla de ambas versiones del país, y a veces, como en esta novela, nos susurra lo que podría ser.
Hay rasgos del país que conocemos, en La Milagrosa: un sindicato, por ejemplo. Pero no es un sindicato cualquiera: extrañamente defiende a sus agremiados.
Hay un detective. Como buen detective, es y no es como los otros detectives. Hay un popularísimo candidato presidencial. Que no es como los candidatos presidenciales a los que estamos acostumbrados. Este candidato es tan conservador, tan ultramontano, tan fanático, tan calculador que…
Y en medio de estos personajes, y de multitudes que creen en su palabra y sus hechos –otra cosa impensable en México-, está una mujer que hace milagros, en un país que de repente cree que el milagro es lo único que le queda como esperanza…
CITAS SOBRE EL LIBRO
Ricardo Pohlenz:
La trayectoria literaria de Carmen Boullosa está marcada por la especulación formal, por un replanteamiento constante de los recursos y de sus alcances, en los que aprehende, primero la anécdota, y luego la trama que la reviste: de la imagen, como consecución lógica, deviene la historia. Lo que es, al mismo tiempo, una apuesta en antecedentes y una meditación del punto originario; una operación de deslinde desde el acto de narrar y de su cuestionamiento intrínseco, como amalgama que propone un juego alternativo a las posibilidades de solución (eso, claro, de haberla).
El semanario del Novedades, 1994.
Jörg Drews:
There is a particular way of presenting Latin American themes in literature which has developed over the years in which, rethorically, is both extremely clever and pleasantly slick. This even includes authors such as García Márquez and Vargas Llosa whose great success has not been for no reason. In presenting what she thinks about Mexico, Carmen Boullosa has developed a narrative strategy which is merciless in its severity and excludes every kind of easily consumable rhetoric. Her language is wiry, direct, absolute. She assumes that her readers are able for a story that cannot simply be savoured in slumps. The texture of this book is as springly as that of a hard rubber ball, and when it hits, it hurts. Unlike the miracle worker, this book is not guilty of the major crime of making the course of life pleasant.
Süddeutsche Zeitung, 1996
Kay Pritchett:
The work of Carmen Boullosa, the Mexican novelist, playwright and poet, has been called complex and fantastical. Both adjetives apply to La Milagrosa, which presents itself as a detective story but then reveals profound symbolic reference to matters of Mexican identity. … Many will enjoy Boullosa´s most recent novel. More thoughtful readers will find the correspondences between its characters and Mexican realities -or unrealities- alluring. Readers seeking simple diversion will be entertained by its intrigue, for essentially it is a kind of whodunit, related not by a detective but by an unnamed character who finds La Milagrosa diary, her lover´s tapes, and some other document in the clenched fists of an unidentified male corpse. Untypical of its genre, however, Boullosa´s novel clarifies neither who did it nor exactly what was done. Readers will enjoy coming up with their own answers.
World Literature Today, Autumn, 1994
SOBRE EL LIBRO
"Der Fluch der guten tat", DS Sonntagsblatt.
TRADUCCIONES
Al inglés: The Miracle Worker, Jonathan Cape, London, 1994, traductora Amanda Hopkinson.
Al alemán: Die Wundertäterin, Suhrkamp Verlag, Frankfurt, 1996, traductor: Susanne Lange.
Al italiano: La Miracolosa, Vallecchi Editore, 1996, traductor: Pino Cacucci.
La milagrosa, Giangicomo Feltrinelli Editori, 2001, traductor: Pino Cacucci.